domingo, 31 de enero de 2016

Prueba del Nexus Player. El excelente trato de Google a sus clientes.

Nuestro salón tiene el gusto de presentar a su nuevo inquilino: el Nexus Player de Google. Explicamos la experiencia obtenida con esta electrónica equipada con Android TV y ensamblada por ASUS.


Contentos de recibir este gadget de Google, una mejora del Chromecast del mismo fabricante, equipado con un sistema operativo Android TV


El pedido lo realizamos directamente en la web de Google, no sin antes haber hablado por chat con atención al cliente, preguntado por la falta de stock del dispositivo durante varias semanas.


Muy amablemente el personal de Google confirmaba que el producto no estaba para nada descontinuado y, que seguían confiando en él, desmintiendo los flujos de información que circulaban por internet respecto al poco apoyo de este dispositivo por parte del fabricante.


Muy feliz nos las prometíamos con el nuevo artilugio en el salón. Empezamos desembalando la fantástica presentación, una vez más, del embalaje del producto. Un "P" de Player en la caja blanca serigrafiada mostraba el gran gusto de Google para dar mucha imagen a cualquier producto. El montaje en el salón con la ayuda de la tarjeta gráfica fue facilísimo.

Antes de comentar el "pequeño" problema encontrado en el dispositivo, hablaremos del interior construido por ASUS

El Nexus Player tiene una CPU Intel Atom de cuatro núcleos a 1,8 GHz con arquitectura 64 bits.

Además la GPU (unidad de procesamiento gráfica) es una PowerVR Serie 6, usada también en los iPad Air y en el iPhone 5S.

Con 1 GByte de RAM, 8 GBytes de memoria interna, el dispositivo es extremadamente ágil en la ejecución de aplicaciones. 

Otra característica muy necesaria para el dispositivo, es usar la tecnología MIMO para mejorar la conectividad inalámbrica. “Multiple Input Multiple Output” permite una cobertura mayor en zonas de difícil acceso eliminando en lo posible la pérdida de paquetes de datos vía WIFI.

El uso de MIMO para el Nexus Player es primordial, pues carece de alternativa de comunicación con el Router de cualquier hogar (no es posible conectarlo por cable de cobre) teniendo que asegurar la reproducción de contenido multimedia sin cortes.


Y es aquí donde lamentablemente hemos sufrido la mala experiencia, con problemas en el sonido de la reproducción de vídeo desde aplicaciones específicas para AndroidTV: Youtube, VEVO o NETFLIX.

Inicialmente pensamos que el problema podría ser del antiguo Router WIFI de ONO, procediendo a efectuar el cambio por un Cisco. Pero nada más lejos de la realidad. Cuando reproducíamos un vídeo, cada 10 segundos el sonido se cortaba,  haciendo perder el hilo del guión de la película, o cortando la música de un videoclip.




Nos pusimos en contacto con Google y, en pocos días y sin coste alguno, cambiamos el Nexus Player por otro equipo, funcionando perfectamente la reproducción de contenido multimedia en streaming. Excelente el servicio de Google.

Por último detallaremos dos soluciones a problemas que el producto puede ofrecer a sus usuarios. 

El primero afecta al dictado por voz mediante el mando. Algunas veces funciona correctamente, otras muchas no.

Para conseguir que el reconocimiento de voz sea el "ideal", nos bajaremos una app del Google Play: "Android TV Remote". Vincularemos esta aplicación con nuestro Nexus Player con su correspondiente código de asociación y podremos controlar desde el smartphone el dispositivo.

Si probamos el reconocimiento de voz desde el smartphone comprobaremos que el ratio de comprensión es altísimo. El dispositivo interpreta lo que le hemos dicho de viva voz sin problemas. Sin conocer el porqué, me aventuro a decir que no es lo mismo detectar las palabras con una comunicación bluetooth, que con un enlace con tecnología WIFI.

Otra controversia del dispositivo es la poca capacidad de almacenaje y que ésta no se pueda expandir mediante su conector USB. Sin tener que reinstalar otro sistema operativo en el Nexus Player, podemos bajar la aplicación Plex para Android TV.


Una vez instalada esta aplicación, podemos ejecutar cualquier contenido multimedia de un servidor Plex cualquiera. Este servidor Plex puede estar alojado en cualquier lugar: PC sobremesa, ordenador portátil o disco duro en red (NAS).

Hemos probado instalando el software para entorno windows. Una vez asociado el dispositivo, reproducimos el contenido multimedia sin problemas alojado en el disco duro del portátil.

Para finalizar la entrada quisiéramos comentar la rareza de cruzar el universo Intel con el sistema operativo Android - en su versión para la televisión -, unión que particularmente no provoca nada de retardo en la ejecución de aplicaciones. Era un producto que se tenía que probar para poder compararlo con dispositivos basados en chips todo en uno (SoC) basados en arquitectura ARM.


Muchísima literatura el la red nos dice que las CPU (SoC) ARM son mejores a las de Intel (SoC). Probablemente sea cierto, aún así, la jugada estratégica de Intel de querer entrar en el mercado de estos dispositivos alejados de PCs y Servidores, hace prever una disputa enorme.

Los usuarios seremos los grandes beneficiados, pues la tendencia será tener una "caja" para el comedor con tecnología 64 bits con: gran velocidad de acceso a la memoria RAM, cifras altas para el ancho de banda de transmisión de datos de lectura o escritura en RAM y, mas y mejores canales entre los "buses" de la CPU (SoC). Todos esto se asemeja a lo que actualmente tenemos en nuestros ordenadores personales (PCs) sobremesa o portátiles. Obviamente no hace falta decir que Intel sabe hacer esos chips.

Para el mercado estrictamente móvil, los fabricantes que usan arquitectura ARM seguirá aportando unidades, al ser estos mejor pensados para consumir poco. 

Realmente recomendable el producto y poder disfrutarlo en el salón. No tiene un coste elevado, podemos enviar contenido al mismo desde cualquier smartphone - como el Chromecast - y tiene una fluidez extraordinaria al reproducir Netflix, VEVO o Youtube.

La cita:

"El software es un gas: se expande hasta llenar su contenedor". Nathan Myhrvold